Durante la última década, los casos anuales de melanoma, la forma más mortal de cáncer de piel, han aumentado en casi un 50% a más de 287.0001. Esto se traduce en más de 60.000 muertes por año relacionadas con el melanoma.

Si sumamos a estas cifras las tasas actuales de incidencia y mortalidad de los cánceres de piel no melanoma, podemos ver por qué los dermatólogos creen que el cáncer de piel ahora debería considerarse una epidemia mundial.

Las cifras oficiales de la Organización Mundial de la Salud estiman que actualmente hay más de un millón de casos de cáncer de piel no melanoma cada año. Sin embargo, dado que muchos países no registran oficialmente casos de cáncer de piel no melanoma, se cree que la incidencia real se encuentra en varios

Para un cáncer que generalmente se puede vencer si se detecta temprano, esta estadística es impactante. Sin embargo, más impactantes son las proyecciones para el cáncer de piel en los próximos 20 años. Los últimos datos de la OMS predicen que, para 2025, el número de muertes por melanoma aumentará en un 20%, hasta el 74% en 2040.